#: locale=es
## Hotspot
### Tooltip
HotspotPanoramaOverlayArea_4BF23EA0_4619_F9C0_41C0_9B4EE6323A0F.toolTip = Can Rufí
HotspotPanoramaOverlayArea_4BE6A190_4618_4BC1_41C0_50253BD424E0.toolTip = Castillo de Caldes
HotspotPanoramaOverlayArea_4BCA6619_461F_C8C3_41D0_CBB92D30642A.toolTip = Fuente de los Hervidores
HotspotPanoramaOverlayArea_49E5C422_4629_C8C0_41C9_AE30B7E6C88A.toolTip = Lavaderos Termales
HotspotPanoramaOverlayArea_4811E24D_4618_4943_41CF_7B8EA955493F.toolTip = Termas Romanas de Sant Grau
## Media
### Título
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panorama_4A5DA61A_4618_C8C6_41D0_D1B76D6FC035.label = PANO0001 Panorama
album_573A915D_4638_4B43_41C9_1A5E117743A6.label = Álbum de Fotos 1-217
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## Tour
### Descripción
### Título
tour.name = Caldes de Malavella
## Ventana
### Cuerpo
htmlText_56EAF343_4638_CF40_41CA_C845E6B5AE7A.html = Can Rufí es una antigua masía situada en las afueras de Caldes de Malavella, en la comarca de La Selva, Cataluña. Construida entre los siglos XVI y XX, ha sido incorporada al Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña, lo que subraya su gran relevancia histórica y cultural. Este edificio refleja el estilo de la arquitectura popular catalana, con una estructura que incluye planta baja, primer piso y desván, destacando por su característico tejado de doble vertiente. Uno de los aspectos más llamativos de Can Rufí es el escudo que adorna su entrada principal, además de las ventanas renacentistas decoradas con elementos como rostros y conchas, que reflejan el arte y la estética de la época.
El entorno de Can Rufí también ofrece un importante valor natural, como la «bassa de Can Rufí», una charca ubicada frente a la masía que se ha integrado en diversas rutas de senderismo que atraviesan la zona. Este espacio, además, actúa como un pequeño ecosistema en sí mismo, albergando varias especies de plantas acuáticas y sirviendo de refugio para aves y anfibios. Estas rutas permiten a los visitantes disfrutar tanto del patrimonio arquitectónico como de los hermosos paisajes naturales que rodean la masía.
Construido en el siglo XII sobre las antiguas termas romanas, el Castillo de Caldes ha sido un elemento central en la historia de la localidad. Originalmente concebido como parte del sistema defensivo medieval, la fortaleza desempeñó un papel crucial en la protección y administración de la villa.
Tras pasar por distintas fases, incluidas funciones residenciales e industriales, en 2015 se completó su restauración para convertirlo en el Centro de Interpretación del Termalismo de Caldes de Malavella. Este espacio, ubicado en la planta baja del castillo, está diseñado para mostrar la conexión histórica del municipio con sus aguas termales, un recurso natural fundamental para su identidad. Además ofrece información sobre el yacimiento paleontológico del Campo de los Ninots y la evolución del termalismo y el turismo en la zona. El centro tiene como objetivo difundir el patrimonio paleontológico, histórico y arqueológico de Caldes de Malavella, subrayando el impacto de las aguas termales en su desarrollo.
Estos espacios, junto a las antiguas termas romanas, ofrecen una profunda perspectiva sobre la importancia que las aguas termales han tenido para los habitantes de Caldes de Malavella a lo largo de los siglos. Desde tiempos romanos hasta nuestros días, las fuentes y lavaderos termales no solo han sido esenciales en la vida cotidiana de la población local, proporcionando agua caliente para lavar y cocinar, sino también han jugado un papel crucial en los rituales de salud y bienestar.
Las aguas termales, ricas en minerales y reconocidas por sus propiedades curativas, se han utilizado para aliviar dolencias físicas y mejorar la calidad de vida de la población. Junto a la Font de la Mina, también conocida como Raig d’en Mel, se encuentra un antiguo lavadero de principios del siglo XX, construido sobre la Riera del Lleixiu. Este lavadero aprovechaba las aguas termales por sus propiedades especiales para blanquear la ropa, ofreciendo un espacio comunitario de gran valor en la vida cotidiana de los habitantes de Caldes de Malavella.
La Fuente dels Bullidors es famosa por sus aguas termales, que emergen a casi 60 °C. Desde la época romana, estas aguas fueron aprovechadas para los baños termales, cuyas ruinas aún pueden visitarse hoy en día. El nombre «Bullidors» proviene del burbujeo que genera la salida de gases, principalmente dióxido de carbono, un fenómeno característico de la actividad geotérmica de la zona.
El agua de esta fuente comenzó a comercializarse en 1902 bajo el nombre de Vichy Caldense, cambiando posteriormente a Agua Xala, y en 1912 adoptó su nombre actual, Agua Imperial. Este producto embotellado ha sido valorado por sus propiedades minerales, consideradas beneficiosas para la salud durante siglos.
Además de su historia, la Fuente dels Bullidors es un atractivo turístico que forma parte de la tradición termal de Caldes de Malavella, una localidad reconocida por sus balnearios. Aún hoy atrae a visitantes que buscan los beneficios terapéuticos de sus aguas termales. La fuente es un ejemplo del importante papel de estos recursos naturales en el desarrollo local y comercial de la región.
Las Termas Romanas de Sant Grau, ubicadas en Caldes de Malavella, son uno de los testimonios más destacados del pasado romano en la región. Construidas entre los siglos I a.C. y I d.C., estas termas formaban parte de un complejo termal más amplio, aprovechando las aguas termales de la zona, que ya en la época romana eran valoradas por sus propiedades curativas y terapéuticas. Estas aguas, que brotan a una temperatura de 56 ºC, han sido un recurso fundamental para la localidad a lo largo de los siglos.
El complejo de Sant Grau destaca por su arquitectura bien conservada, con diferentes espacios destinados a los baños de agua caliente (caldarium), templada (tepidarium) y fría (frigidarium), lo que reflejaba el sofisticado sistema de higiene y bienestar de la civilización romana. Además de su función sanitaria, estas termas eran un importante lugar de encuentro social, donde los ciudadanos acudían no solo a relajarse, sino también a compartir información y establecer relaciones.
Las excavaciones arqueológicas en las termas han permitido recuperar numerosos detalles de la vida cotidiana romana en Caldes de Malavella. Hoy en día, las Termas Romanas de Sant Grau son un importante atractivo turístico y forman parte del patrimonio histórico de la ciudad, conectando su identidad con su pasado romano y el uso continuo de sus aguas termales.